La semana pasada escribí una nota sobre el sorpasso protagonizado por Javier Milei. En la previa a las PASO pensaba que el libertario se haría con un 25% de los votos frente a 35% de JxC y 30% del PJ, y como todos me sorprendió el resultado que, simplificando, implicó un trasvase de cinco puntos porcentuales de JxC a LLA. Hoy voy a hablar de cómo JxC perdió a parte del casi 43% que lo votó en 2021 y cómo puede intentar recuperarse.
Los votos los perdieron por mirarse el ombligo de una interna en la cual ni Patricia Bullrich ni Horacio Rodríguez Larreta presentaron verdaderas propuestas de lo que harían con el país en caso de ganar. Y el voto blando que habían ganado se alejó al no ver representadas sus demandas (resumidas en «poder vivir») en los candidatos.
Ayer se anunció que Carlos Melconián sería el ministro de Economía en caso de ganar Bullrich las elecciones presidenciales. Se viene hablando de esta noticia desde el 14 de agosto como una forma de plantarse frente a Milei y su discurso economicista. Y si bien aplaudo la elección de Melconián, ya que tiene un excelente equipo detrás y una capacidad de comunicación esencial para ejecutar las medidas de ajuste que vendrán, en la campaña lo que se necesita es política.
Pensando esta nota recordé una que escribí en El Cronista en 2010 en la que lamentaba que los partidos políticos argentinos no pudieran suscribir un acuerdo de políticas de Estado, un Pacto de la Moncloa, porque taras ideológicas les impedían postular el «estructurar sus economías sobre el mercado». Y sugería un objetivo más modesto que era que la UCR, en ese momento el principal partido de la oposición, se modernizara en esta dirección.
Lamentablemente, en la UCR todavía una fracción importante de sus dirigentes está convencida que debe haber el mayor Estado posible y solo el mercado necesario. Pero la sugerencia de 2010 se puede aplicar hoy en día a JxC, coalición dentro de la cual esta fracción de la UCR es una minoría, máxime después de los resultados de las PASO.
Creo que lo mejor que puede hacer JxC, de cara a las próximas elecciones, un eventual balotaje, y la vida después del 10 de diciembre (ya sea en el gobierno o en la oposición), es definir su identidad programática para que los ciudadanos frustrados tengan una opción de voto clara, definida. Aquello que hace casi tres años pedía en este blog como una interna para la coalición que resultara en un programa integral de gobierno (cosa que todavía no tiene).
Parte del 15% de votos perdidos entre 2021 y este año se puede recuperar pero esto requiere que los votantes vean una alternativa al modelo populista que sea algo más que el «populismo light» del gobierno de Macri. La gente realmente quiere cambio y JxC hoy no está representando esta demanda. Pero no es tarde para que Bullrich, Larreta y Macri se pongan los pantalones largos y modernicen al que tiene el potencial de ser el principal partido político de la Argentina.
Como terminaba la nota del Cronista, y máxime en este año aniversario: ¡Es imprescindible que nuestra democracia siga gozando de buena salud!
Gracias por esta interesante publicación. Atentamente, Horacio O. Suriano
Muchas gracias Horacio. Saludos cordiales.
¿No parece un pocotarde para jugar el partido? ¿No ve dificil que HRL pueda jugar el partido. Lo mejor seria que hable pocoy que deje en manos del resto de JxC la tarea de enamoorar votantes . . . HRL es uno de los «responsables» del fracaso, porque es la imagen de fracaso.
Gonzalo, JxC debiera consensuar un modelo de país, modernizar el partido como algo más que el anti-kirchnerismo o el republicanismo. Creo que Larreta puede aportar si acepta que el «modelo» hoy es más cercano al que quieren Macri o Bullrich que su ideal. Y que se requieren unos 20 años de estabilidad y crecimiento para replantearse qué nuevo modelo querremos en el futuro, como de alguna manera sucedió en Chile. Saludos.
no parece haber incentivos a explicitar politicas de gobierno. Hasta ahora..»el que habla se jode» (J.A. Roca) Ud. y yo, seres muy racionales y preparados, esperamos que nos digan un programa, pero parece que a la mayoria esto no les interesa, en parte, porque no les creen a los politicos. Quizas ademá de otras virtudes civicas tambien somos ingenuos.
Chofer, desde la nota linkeada de hace tres años que vengo pregonando que JxC haga un mea culpa (Macri algo de autocrítica hizo) que lo vuelva a reconectar con la gente. ¿Porqué prende tanto la idea de la dolarización de Milei? Porque la gente sufre mucho con la inflación y sabe que el dólar no pierde valor como el peso. En su momento se votaba a JxC porque representaba el hartazgo de las clases medias con las formas del kirchnerismo. Hoy en día el hartazgo es con el fondo y JxC sufre en las urnas no haber reconectado con sus votantes. Es muy fácil (creo) explicar que lo que se quiere eliminar no son «derechos» sino «privilegios». Tenemos el ejemplo de Aerolíneas Argentinas (dicho sea de paso si sale una ley que prohibe su venta, aún parcial, debe quedar claro que eso aumenta la probabilidad de su quiebra, pero eso es tema para otra nota), los nombramientos en planta permanente de final de mandato, etc. El problema es que, al igual que en su comentario, los dirigentes creen que «el que habla se jode». Bueno, en los hechos el que más habló, Milei, fue el que ganó las elecciones. Saludos.